A estas horas, el satélite con sello 100 % español SEOSAT/Ingenio, una misión destinada a recopilar imágenes terrestres –capacidad de imagen de 2,5 millones de kilómetros cuadrados por día– y que iba a ayudar en disciplinas como la cartografía, la agricultura, la silvicultura, el desarrollo urbano y la gestión del agua, debería estar en órbita. Pero una de las iniciativas espaciales más importantes de la historia de España ha fallado.
Según Arianespace, empresa francesa responsable del cohete Vega que transportaba al satélite, todo iba bien. SEOSAT-Ingenio despegó como estaba programado desde el Centro Espacial de Kurú, en la Guayana Francesa. Las primeras etapas funcionaron… hasta el encendido de la etapa superior AVUM, ocho minutos después de la salida de la plataforma de lanzamiento. “En ese momento se detectó una trayectoria degradada, seguida de una pérdida de control del vehículo y la posterior pérdida de la misión”.
Cabe recordar que una pequeña desviación en una misión de esta envergadura puede suponer un fracaso. En este caso, se debía llegar a su órbita, a unos 670 kilómetros de altitud, donde INTA (Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial español)–en Torrejón de Ardoz–, asumiría las operaciones rutinarias
Así, según las investigaciones realizadas hasta ahora, ha sido un fallo humano –no de diseño– relacionado con el ensamblaje en el motor que controlaba el recorrido –de ahí la importancia de la trayectoria fallida–, “la causa más probable de la pérdida de control del lanzador”, han asegurado.
El 18 de noviembre comenzará una comisión independiente de investigación presidida por Daniel Neuenschwander, director de Transporte Espacial de la ESA, y Stéphane Israël, director ejecutivo de Arianespace, en la que tratarán de esclarecer cuál ha sido verdaderamente el fallo.
“Arianespace expresa sus más profundas disculpas a los clientes y fabricantes de satélites involucrados en esta misión”, han finalizado.
Actualmente, el satélite, se encuentra en una zona deshabitada cerca de la zona de caída prevista para la etapa Zefiro 9 –la tercera fase del cohete Vega–.
¿Un fracaso completo?
La misión SEOSAT-Ingenio no ha sido un completo fracaso. El proyecto, que inició su andadura en 2008, puede servir como aprendizaje para volver a intentar tomar imágenes pancromáticas y multiespectrales –concretamente, de España, Europa, Iberoamérica y el norte de África–, su misión original, y estas redundarán en el beneficio de la sociedad.
Este trabajo ayudaría a aplicaciones civiles de relevancia crítica como cartografía, agricultura, silvicultura, desarrollo urbano, monitorización del uso del suelo, gestión del agua, riesgos y desastres naturales, costas o movilidad de población, entre otras.
Esta misión era española. Pero como han remarcado siempre desde el consorcio, “ constituye una misión nacional española, pero es el resultado de un esfuerzo de colaboración internacional”.
El talento detrás de SEOSAT-Ingenio
SEOSAT-Ingenio ha sido financiado por el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI), del Ministerio de Ciencia e Innovación de España, y ha sido desarrollada por la ESA en el marco de la Arquitectura Europea de Observación de la Tierra.
Varias empresas españolas han formado parte del proyecto: Airbus España, Crisa, Indra, Sener, Deimos Space, GMV, GTD, HV Sistemas, Iberespacio y Thales Alenia Space.
