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Celeste Campo: “En España faltan contenidos divulgativos de calidad para los más pequeños”

La ingeniera está involucrada con los distintos programas de la UC3M destinados a acabar con la brecha de género en el ámbito STEAM
Celeste campo Uc3m

“Las vocaciones se moldean con el paso del tiempo. Implican un proceso de reflexión interna, pero el entorno influye mucho. La gente que conoces, tus padres…” Celeste Campo es Ingeniera de Telecomunicación por la Universidad de Vigo y Doctora por la Universidad Carlos III, donde actualmente es profesoras y Vicerrectora Adjunta de Promoción en el Vicerrectorado de Estudiantes e Igualdad. Su involucración con los programas de la UC3M que favorecen las vocaciones STEAM es directa. “Promovemos que los jóvenes entiendan mejor qué son la ciencia y la tecnología a través de talleres y que tengan referentes; que visualicen a mujeres reales que están haciendo cosas”. 

Encuentros físicos con las estudiantes que la UC3M impulsa bajo el paraguas de ‘Ciencia y Tecnología en Femenino’ (que arrancó ayer) o ‘STEM4GirlsUC3M’. “Se llevan a casa unas líneas generales de aspectos muy variados; desde la construcción de un cohete al trabajo en el laboratorio”. Celeste Campo también está detrás de Technovation Girls, que celebra una nueva edición el próximo 23 de octubre. “En este programa buscamos dar con soluciones a problemas reales”.

Esto esfuerzos están dirigidos además a derribar barreras aún sólidas que contribuyen a la desmotivación y a la confusión ante las carreras STEAM. “Uno de los problemas es que los estudiantes no entienden la capacitación que les otorgarán determinados títulos”. Para Celeste Campo, la nomenclatura influye, pero no siempre. “El bajón de chicas en ingeniería informática puede deberse en parte a que pasó de ser una licenciatura a una ingeniería, pero sobre todo a la configuración de un estereotipo del informático como alguien solitario metido en un cuarto oscuro. Hay que hacer mucha pedagogía y explicar los fundamentos de cada formación. También los muchos trabajos que hay detrás”.

Celeste Campo reconocía echar de menos un papel más activo de los medios de comunicación como divulgadores masivos y rigurosos. “Su efecto sería multiplicador. Si hablaran más de igualdad de género, ésta se alcanzaría antes. Lo mismo ocurre con las vocaciones. Convendría un esfuerzo para crear contenidos audiovisuales de calidad con la ciencia y la tecnología como protagonistas y los más pequeños como target”. Campo cree que, pese que la FECYT y distintos museos “están haciendo un trabajo divulgativo muy interesante”, hay margen de mejora para calar en edades más tempranas.

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