Los patinetes eléctricos están a la orden del día. Pero ¿uno que es inteligente, sostenible y además eficiente y más seguro? Pues eso es Scootech, el nuevo proyecto de Aimplas, que se ha presentado recientemente en la Semana Europea de la movilidad. Integra tecnologías avanzadas y sirve como ejemplo de cómo la llamada «plastrónica», representada en este patinete, no sólo sirve para algo tan concreto como la movilidad, sino también para la automoción, la salud o la electrónica de consumo.
La plastrónica, según la definición de la propia Aimplas, es «una nueva línea de investigación en el campo de la electrónica que abarca la integración de componentes electrónicos en materiales plásticos, el desarrollo de electrónica flexible y el uso de materiales conductores basados en polímeros a partir de materiales orgánicos e híbridos».
Esto es, es la unión entre el plástico y la electrónica. Automoción, aeronáutica, aeroespacial, electrónica de consumo y línea blanca… Todos pueden aprovecharse de una innovación que puede crear plásticos que tengan funciones electrónicas. Se basan en polímeros con cargas conductoras eléctricas o térmicas integradas, que combinan la conductividad eléctrica de los metales con los plásticos, más ligeros, procesables, resistentes a la corrosión y más baratos. Suelen crearse a través de fabricación aditiva —impresión 3D—.
Sin embargo, la plastrónica también se refiere a la electrónica flexible impresa; es decir, aquellos dispositivos electrónicos que pueden doblarse, estirarse o conformarse independientemente de su composición de material sin perder la funcionalidad. Más allá de servir para sensores, transistores, antenas o LEDs orgánicos pueden funcionar como parte integrada de objetos inteligentes… Como Scootech.
Cómo es el patinete
Según Susana Otero, investigadora líder en Ciudades, Movilidad y Energías Sostenibles en Aimplas, Scootech «no sólo reduce el número de componentes, sino que también facilita el proceso de montaje y mejora la reciclabilidad del producto». La electrónica flexible, los sensores capacitados permiten una mayor experiencia y funcionalidad. Pero hay más.
«Entre sus innovaciones más destacadas se encuentra una consola central ultrafina que integra sensores de temperatura, presión, deformación e iluminación directamente en las piezas plásticas del patinete». Además, «el dispositivo cuenta con una antena NFC para la activación del sistema y mangos calefactables que integran dos tecnologías innovadoras: una lámina calefactable y una resistencia impresa en 3D con material conductivo desarrollado por Aimplas», cuenta Otero.
Y es que cuenta con otros aspectos, como botones táctiles para el control del encendido y las luces, iluminación LED híbrida para una retroiluminación eficiente y un slider táctil para ajustar la intensidad de la luz frontal. Todo ello puede ser «personalizable» para su uso en otros sectores, como ya se ha mencionado anteriormente.
«Desde Aimplas ponemos de manifiesto cómo la plastrónica puede transformar productos y procesos, proporcionando soluciones sostenibles, eficientes y adaptadas a las necesidades del futuro», asegura la investigadora. Cabe destacar, además, que este demostrador también incluye un casco inteligente con sensor capacitivo de presencia y un sensor de presión en el propio patinete para medir el peso del usuario, mejorando la seguridad y la interacción con el vehículo. Scootech es algo más que un patinete.