Menos del 14% de las fábricas estadounidenses está conectado a un red. En España, las cifras son similares. Rockwell Automation y Cisco se han aliado para ayudar a las empresas a abordar la transformación digital. Las posibilidades son enormes en un mercado casi inabarcable.
“La transformación digital del sector fabricación implica conectar las máquinas, los sensores y los sistemas de control a Internet, capturar y analizar los datos, garantizar la seguridad y obtener una completa visibilidad para tomar mejores decisiones en tiempo real, no sólo a nivel de planta, sino a través de toda la cadena de valor”, explica Ignasi Errando, director de Internet of Everything en Cisco España. Actualmente, una nueva forma de replantear los procesos productivos es posible. El nombre que se le da la nueva revolución industrial es Connected Enterprise (Empresa Conectada). “Este nombre esta basado en el intercambio de información entre todo tipo de dispositivos y sistemas, tanto de fábrica, como del resto de la cadena de suministro”, afirma José Paredes, director general de Rockwell Automation Iberia.
El beneficio que se obtendrá de esta nueva era es amplio: mayor agilidad de fabricación, aumentos importantes en la productividad y sostenibilidad de los procesos. Paredes destaca que “la evolución tecnológica y las nuevas tendencias en sistemas de producción permiten cambios sustanciales en las fábricas actuales”, y subraya: “con conceptos como IoT, Empresa Conectada, o Industria 4.0, se definen nuevos marcos de trabajo entre los sistemas de control y los sistemas de información, siendo clave la convergencia entre ambas plataformas, y de cuyo éxito dependen importantes ventajas competitivas para la industria”.
Así, Cisco y Rockwell creen que este paso tan necesario se debe basar en la conectividad integral de todos los sistemas de la empresa: la conexión de las tecnologías de operación (OT) con las tecnologías de información (IT). “Esta conectividad total permitirá disponer de información detallada, especializada y proporcionada a cada persona en el momento adecuado”, asegura Paredes. Las dos compañías utilizarán la tecnología de comunicaciones EtherNet/IP, considerada por ellos como la idónea para aplicarla en cualquier parte de la empresa, garantizando de esta forma, “la convergencia entre OT e IT”.
Cinco fases son las que Rockwell Automation cree necesarias para llevar a cabo la estrategia de Empresa Conectada, su modelo de ejecución. Antoni Rovira, responsable de arquitecturas integradas de Rockwell Automation Iberia, las expone: evaluación de redes OT/IT, junto con las políticas de seguridad; crear la seguridad en redes, además de sus actualizaciones; definir datos WDC (Working Data Capital); analizar y mejorar; y, por último, el estado de colaboración, anticiparse a los hechos junto a otras empresas.
Esta estrategia ya ha sido probada y aplicada en dos casos: en la propia Rockwell y en una multinacional del sector de la alimentación (de la que no han querido dar su nombre). Por otro lado, Cisco también ha implementado su proyecto en una conocida empresa de motos, Harley Davidson, donde han asegurado que su aplicación ha sido “segura, flexible y eficiente”. Según Jesús Mansilla, RSM de Cisco, “lo que tardaba en hacerse horas e incluso días, ahora se soluciona en unos segundos”.
