Juan Zubiaurre, eibarrés de 25 años y socio cooperativista del grupo de innovación Tazebaez organiza la feria Berdeago desde su primera edición, celebrada en 2013. La cita, convertida en referencia de la sostenibilidad medioambiental , volverá a reunir la localidad vizcaína de Durango a agentes públicos y privados de todo el país en dos fases: los próximos 19, 20 y 21 de enero tendrá lugar Berdeago Energy con el foco en la eficiencia energética en los sectores de la edificación y la movilidad; mientras que su hermana, Berdeago Nature, orientada a la ecología y el consumo responsable, celebra su segundo cumpleaños 27 y 28 de enero.
130 expositores y unos 20.000 visitantes son las cifras que maneja Zubiaurre, que mientras remata detalles de última hora, explica que la estrategia de esta quinta edición pasa por la consolidación de Berdeago Nature con visitantes de mayor calidad mientas que, en el caso de Berdeago Energy, esperan “atraer las innovaciones más disruptivas del sector y mantener la asistencia del público profesional al que hemos logrado llegar con éxito hasta ahora”.
Entre las novedades, la relevancia que los organizadores han otorgado al estándar alemán "Passivhaus", que trata de establecer unos criterios muy rigurosos en el sector de la construcción en cuanto a eficiencia energética. “Definitivamente”, añade Zubiaurre, “ se centra en la hermeticidad y en el aislamiento con el fin de crear viviendas con un gasto energético cercano a 0 en cualquier estación del año”. En cuanto a Berdeago Nature, destacará la presencia de snacks orgánicos y libres de pesticidas en el sector y proyectos de economía solidaria en el sector de las finanzas éticas y corredurías seguros éticos.
Muchas de las cuestiones que Berdeago pone sobre la mesa han vivido un impulso notable en los últimos años. Según Zubiaurre, “hay una mayor concienciación sobre los aspectos que tratamos, pero todavía queda mucha labor para que consigamos normalizar estos hábitos y proyectos. Quizás dentro de 20 años sea obligatorio que los productos que estén en el mercado sean ecológicos certificados y que las fuentes de abastecimiento de energía sean en un porcentaje mucho mayor renovables. En mi opinión es cuestión de tiempo y de que se armonicen los sectores”.
Entre los principales logros que han vivido más de cerca hasta la fecha, Zubiaurre observa “mejoras importantes” en el aislamiento de las fachadas del actual parque inmobiliario, así como la instalación de nuevas soluciones de origen renovable. “Tanto el IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía) como el EVE (Ente Vasco de la Energía) están apoyando proyectos de ahorro energético en la edificación que pueden generar confort y ahorro tanto en viviendas unifamiliares como en comunidades de vecinos”.
Aunque aún hay que contar con el freno que suponen “intereses contrapuestos en varios sectores” y que hay que “esperar la evolución de estos obstáculos en los próximos años”, el organizador de Berdeago considera que el País Vasco va un paso por delante en la voluntad de mejorar el entorno y la calidad de vida de los ciudadanos. Zubiaurre detalla cómo países Dinamarca, Noruega o Alemania son referentes en materia de energía al aplicar con mayor rigidez las políticas energéticas provenientes de la Unión Europea. En cuanto a consumo responsable, la penetración de productos ecológicos es también mayor que en España en países como Finlandia, Suiza y Austria, “a pesar de liderar a nivel europeo la superficie destinada al cultivo de producción ecológica”.
Para subir en este particular ranking entiende que hay que poner el dedo en la llaga desde muy pronto. “Existe una gran labor de concienciación en este sentido por parte de muchos agentes (instituciones públicas, empresas, asociaciones, y otros colectivos) ya que el desconocimiento de las nuevas soluciones existentes es muy grande entre el público en general. Para ello, necesitamos que todos los sectores integren la sostenibilidad como algo esencial, en aspectos económicos, sociales y medioambientales, que nos ayudará a tener un entorno y una sociedades más equilibrados”, concluye.
