Un nuevo mamífero que vivió en la región pampeana durante el Pleistoceno ha sido descubierto por un investigador de la Universidad Nacional de Rosario (Argentina), a partir del análisis de un fósil en el Museo Paleontológico de San Pedro.
El nuevo género pertenece a un perezoso terrestre gigante cuyos parientes fósiles fueron encontrados por primera vez hace más de 170 años por Charles Darwin en su paso por Argentina. El hallazgo de un cráneo del nuevo animal ocurrió físicamente en el año 2009, pero ahora, en el marco de un proyecto radicado en la Facultad de Ciencias Exactas de la UNR, ha sido estudiado y analizado. La conclusión es que se trata de un mamífero nuevo en su tipo.
La investigación, dirigida por el doctor en Ciencias Biológicas Luciano Brambilla, del Laboratorio de Paleontología, ha comenzado con la revisión de los materiales depositados en numerosos museos de la región, entre los que se encuentra el Museo Paleontológico ‘Fray Manuel Torres’, de San Pedro.
El fósil había sido hallado por Fausto Capre, maquinista de la empresa ‘Tosquera San Pedro’, mientras efectuaba trabajos de extracción de tosca a unos 18 metros bajo el nivel del suelo actual.
“La forma de su paladar y la distribución de sus piezas dentales parecen ubicarlo en una posición intermedia entre las especies conocidas, por lo que se podría inferir que su dieta era herbívora, pero bastante variada e inespecífica”, expresa José Luis Aguilar, director del Museo.
Comparado con los dos grandes perezosos conocidos (Milodonte y Glosoterio), el nuevo animal presenta una prominencia robusta y marcada delimitando la región superior y anterior de la órbita del ojo, lo que seguramente aportaba un detalle particular a su rostro.
Se estima que este mamífero vivió hace 800.000 años, mientras que los que ya se conocen son más recientes, de unos 120.000 años. El investigador supone que su aspecto físico general no se aleja demasiado de los otros: cubierto de una gruesa piel, con abundante pelambre, manos provistas de gruesas e importantes garras para defenderse o enganchar ramas y hojas, una longitud superior a los 3 metros, con una altura entre 1,40 a 1,60 metros, y una masa corporal de más de 2.400 kilos.
La nueva especie ha sido bautizada como Archaeomylodon Sampedrinensis. La primera parte del nombre hace referencia a la antigüedad del fósil descubierto con respecto a sus parientes más cercanos, mientras que la segunda destaca la procedencia geográfica del lugar donde fue descubierta.