Un grupo de informáticos de la Universidad de Jaén (UJA) ha colaborado con arquitectos de la Universidad de San Carlos en La Antigua (Guatemala) en la reconstrucción virtual de edificios históricos gracias a tecnología de punta.
“Con drones y cámaras especiales de alta resolución adquirimos información y generamos modelos 3D”, explica Francisco Ramón Feito, responsable del Grupo de Investigación Informática Gráfica y Geomática de la UJA. “Tener un modelo 3D, que no es una foto, permite hacer una reconstrucción virtual de cómo estaba eso antes de su derrumbe”, añade Feito.
“Conjugamos tecnología y patrimonio, informática e historia de la arquitectura”, precisa por su parte Danilo Ernesto Callén, profesor de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de San Carlos (FARUSAC). De acuerdo con Callén, además de drones y cámaras de alta resolución, han utilizado en otras ocasiones lidar (un dispositivo que permite determinar la distancia desde un emisor láser a un objeto utilizando un haz láser pulsado), portátiles y cámaras térmicas (que forman imágenes luminosas visibles para el ojo humano, a partir de las emisiones de infrarrojos medios del espectro electromagnético de los cuerpos detectados).
Esta vez reconstruyeron virtualmente el Convento de la Recolección, y el de de Santa Teresa, ubicados en La Antigua, considerada Patrimonio de la Humanidad desde 1979. Lo mismo hicieron con el edificio de la Municipalidad de la ciudad de Quetzaltenango y con la fachada de la Catedral del Espíritu Santo.
El Convento de la Recolección, uno de los sitios más visitados de La Antigua, fue construido a principios del siglo XVIII por la orden de los Recoletos, y destruido por dos terremotos. El último en 1773, el de Santa Marta, lo dejó en ruinas.
Ese mismo terremoto destruyó las cúpulas del Convento de Santa Teresa, a cargo de la orden de las Carmelitas Descalzas. Las ruinas de este templo, uno de los más representativos de la época colonial, se mantienen cerradas al público y solo pueden ser observadas a través de la puerta principal. Pero gracias a la reconstrucción 3D será posible saber cómo eran estos espacios antes de derrumbarse.
Una Colaboración de largo aliento
Ambas instituciones llevan más de dos años trabajando juntas. El último proyecto conjunto ha sido desarrollado a principios de septiembre en Guatemala. Este forma parte de uno más amplio sobre el estudio evolutivo del estilo Neoclásico en edificaciones italianas, españolas y guatemaltecas, realizado con la Universidad de Salerno y el Observatorio del centro Histórico de Nápoles. También han podido reconstruir virtualmente otros monumentos italianos en Pompeya, Nápoles, Caserta y Carditello.
El equipo de Callén ha trabajado en España en proyectos de arquitectura Mozárabe y Mudéjar con la Universidad Pablo de Olavide y está colaborando con un proyecto en el Cástulo de Linares, en Jaén. El siguiente vídeo es un ejemplo de una reconstrucción 3D de las ruinas de Bobastro, un templo Mozárabe ubicado en Málaga, hecho con la UJA.
“Lo hicimos por medio de estudios de casos análogos, elementos encontrados en museos (capiteles en el museo de Málaga), combinados con imágenes fotogramétricas del sitio. Nuestra interpretación difiere de la que se encuentra en el ingreso del sitio, que a nuestro criterio desvirtúa la grandeza del lugar. Podemos estar equivocados, por supuesto, pero al ser reconstrucción virtual, no tocamos el monumento”, aclara Callén.
Mientras que su equipo cuenta con un apoyo de la FARUSAC, el de Feito se enmarca dentro del proyecto estatal de I+D+i, “Herramientas de Informática Gráfica para la gestión de datos 3D y 4D”, financiado por el Ministerio de Ciencia y Tecnología, que emplea técnicas de realidad aumentada y realidad virtual en infraestructuras urbanas y arqueológicas.