“Es de esas cosas que suceden, pero que uno no espera”. A la sorpresa inicial le siguió cierta satisfacción. “La sensación de que el esfuerzo de años vale la pena; esfuerzo que tiene que ver con la pasión que uno imprime a lo que hace”, afirma Enrique Aliste, director del Departamento de Geografía de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo (FAU) de la Universidad de Chile y ganador del Premio Nacional de Geografía 2018 de su país, galardón que comparte con el profesor Belisario Andrade.
En especial agradece el apoyo de sus colegas. “Fue muy estimulante que la iniciativa surgiera de otras universidades, le da un valor especial”, afirma. “Me sorprendí cuando colegas de varias universidades (UC, UC del Norte, Austral, entre otras) me dijeron que me estaban postulando al premio –asegura–. Pregunté: ¿En serio?”.
Aliste reconoce que este reconocimiento le plantea “grandes desafíos”, ya que no puede estar al margen de temas importantes que están sucediendo en Chile, como “lo que está pasando con el litio, en Puchuncaví y en Quintero; en el Sur con el tema forestal, en Isla Riesco, lo que sucede con el valor patrimonial del territorio, etc.”.
También se refiere a “los procesos territoriales que hoy no son visibles, pero que probablemente anticipan situaciones de mucha mayor complejidad, por ejemplo, en temas forestales o en territorios australes, sobretodo en Patagonia”.
En su opinión, “hay una privatización de los discursos ambientales que es preocupante. Tenemos una responsabilidad grande, yo soy reacio y cauto al emitir opiniones, pero me interesa hablar sobre qué tipo de territorio estamos construyendo socialmente; ahí me interesa tener una voz autorizada, pero desde la responsabilidad, hay una responsabilidad ética muy grande”.
Respecto al futuro, considera “atractivo y necesario” que, “frente a fenómenos complejos, tengamos miradas distintas de tantas disciplinas; e incluso desde una misma disciplina”. Se trata, asegura, de “avanzar a partir de distintos ámbitos del conocimiento”.
“Me gustarнa que en 10 años se incrementara la investigación en temas territoriales, que atañen a la geografía, pero que, además, se abran a distintas perspectivas del conocimiento –dice–. Los temas territoriales no son de uso exclusivo de la Geografía, pero sí creo que los geógrafos tenemos una oportunidad tremenda porque sabemos ver, entender y dialogar de manera interdisciplinar, sabemos hacer síntesis de las distintas miradas que se construyen”.
Por ello, reclama mayor respaldado “desde una acción más decidida del sistema de la ciencia y tecnología en Chile, entendiendo que este tipo de construcción de conocimientos y el desarrollo tecnológico requieren de una actitud más decidida de un Estado que cree en el futuro o que quiere tener una perspectiva de futuro como país”. Y es que “sin ciencia o tecnología esto no se logra”.
“Me gustarнa que pudiéramos decir en unos años más que logramos hacer entender al país que la relevancia de la investigación no tiene que ver con un gusto que se dan ciertas personas, sino que tiene que ver con cómo responsablemente se aporta el conocimiento que necesitamos como sociedad para avanzar o para constituirnos en lo que nosotros pensamos que debemos ser como sociedad”, añade en una entrevista publicada en la web de la Universidad de Chile.