La Organización Panamericana de la Salud / Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS) y la ONG Jhpiego, afiliada a la Universidad Johns Hopkins, han lanzado una nueva aplicación móvil, disponible ahora en español, para facilitar la difusión en América Latina de la píldora que previene el VIH.
El número de casos del VIH que surgen cada año en América Latina y el Caribe se mantienen en 120.000 desde 2010. La profilaxis preexposición o PrEP, por sus siglas en inglés, es uno de los recursos de alta efectividad que existen para prevenir la infección. Desde 2015 la OMS recomienda que se ofrezca como una opción de prevención adicional para las personas con riesgo sustancial de infectarse. El uso diario de este medicamento reduce hasta el 90 por ciento el riesgo de contraer esta enfermedad.
Ante la necesidad de asesoría sobre cómo considerar su introducción y comenzar su puesta en marcha, la OMS desarrolló una herramienta de implementación consistente en una serie de módulos -disponibles en la web-, a los que ahora puede accederse en español y, de forma rápida y sencilla, a través de la aplicación para teléfonos móviles y tabletas denominada PrEP Oral.
“Ampliar el acceso a la PrEP puede acelerar el descenso de las nuevas infecciones, especialmente en las personas que están en alto riesgo”, afirma Massimo Ghidinelli, jefe de la Unidad de VIH, Hepatitis, Tuberculosis e Infecciones de Transmisión Sexual de la OPS. “Esta medida, junto con la utilización de otros métodos de prevención, incluyendo los condones, puede contribuir a poner fin al sida para 2030”.
La aplicación presenta cinco módulos con información dirigida a profesionales clínicos, consejeros, farmacéuticos, prestadores de pruebas del VIH y usuarios de la PrEP. Así, podrán encontrar detalles sobre temas clínicos, profilaxis, criterios y contraindicaciones, esquemas, uso, abordaje y asesoramiento; así como temas farmacéuticos, inicio y monitoreo, y mensajes clave y preguntas frecuentes para quienes estén considerando iniciar la PrEP y para quienes ya la utilizan.
La profilaxis preexposición es relativamente nueva en la región americana, donde solo cinco países, las Bahamas, Barbados, Brasil, Canadá y los Estados Unidos, la ofrecen actualmente como parte de sus políticas públicas.